Siempre he hecho referencia a que la alimentación es realmente la clave más grande para generar una salud sostenible para nuestra piel.
Alejarnos de las dietas inflamatorias, grasas saturadas y ultraprocesados es de vital importancia para mantener nuestro resultados, retrasar las señales del envejecimiento y lucir una piel divina.
Estos son los siete alimentos que no deben faltar en una alimentación balanceada que mejore la salud de tu piel:
Los frutos secos y las semillas: son grasas saludables y fuentes ricas en omega-3, vitaminas A, B y E y antioxidantes que contribuyen a la elasticidad de la piel.
El aguacate: es una fruta rica en ácidos grasos y en vitaminas B, C, D y E, nos aporta nutrientes importantes en la producción del colágeno natural de la piel, antioxidantes que mantienen a raya los radicales libres, y es una buena fuente de omega-3.
Los probióticos: como el yogur, el kefir y la kombucha nos ayudan a preservar y recuperar las bacterias buenas que viven en nuestro organismo, reforzando así la barrera que combate las bacterias malas y controlar la inflamación.
Fresas y frutos rojos: Son importantes en el aporte de vitaminas y antioxidantes, la familia de los frutos rojos son además frutas de bajo índice glucémico, por lo que no van a elevar nuestros niveles de glucosa en la sangre con rapidez.
Las aceitunas: Nos aportan grasas saludables y antioxidantes que cumplen un papel en combatir los radicales libres que contribuyen a la oxidación del cuerpo y el envejecimiento.
La piel siempre va a ser un reflejo de nuestra alimentación, por lo que prestar mayor atención a lo que consumimos nos va a brindar beneficios importantes a corto, mediano y largo plazo. Si tus problemas de piel persisten y quisieras una asesoría sobre cómo mejorar la salud de tu piel, te espero en mi consultorio con los brazos abiertos ¿Deseas agendar una cita con nuestros especialistas? Haz click aquí.